Este tratamiento está especializado en la aplicación de escarcha seca. Su temperatura ronda los -150 °C y puede utilizarse para una amplia gama de problemas de salud. Existen dos tipos de crioterapia: la crioterapia localizada se utiliza para la piel y el reumatismo, mientras que la crioterapia de cuerpo entero se utiliza para todo el cuerpo (por ejemplo, para mejorar la inmunidad). El procedimiento se realiza en una criosauna o criocámara y el tratamiento dura entre uno y tres minutos.
¿Qué le ocurre al cuerpo durante la crioterapia?
Hay un fuerte riego sanguíneo en la piel, así como en el tejido subcutáneo, los músculos y los tendones. No hay riesgo de quemaduras por congelación durante el tratamiento. El aire de las criocámaras y criosaunas está especialmente tratado para garantizar la seguridad.
¿Cuáles son los beneficios de la crioterapia?
Como se ha mencionado en la introducción, la crioterapia es eficaz sobre todo en enfermedades reumáticas (especialmente artritis reumatoide, Morbus Bechterew, etc.). La crioterapia también es adecuada después de una intervención quirúrgica o de lesiones difíciles de curar. También es un excelente tratamiento complementario para enfermedades autoinmunes (por ejemplo, psoriasis, esclerosis múltiple), asma, eczema y otras afecciones cutáneas. La crioterapia es eficaz para muchas enfermedades crónicas, pero debe consultar a su médico para saber si es adecuada para usted. La crioterapia hace que su sistema inmunitario entre en acción y activa los procesos de curación y la secreción hormonal del organismo.
¿Cuándo no es adecuada la crioterapia?
Por desgracia, existen contraindicaciones en las que no se puede utilizar la crioterapia.
– Pacientes con hipertensión
.
– Pacientes con marcapasos [26].
– Pacientes con alergia conocida al frío [27].
– Pacientes con infección o resfriado en curso [28].
– Fiebre [29].
– Pacientes tras un infarto de miocardio, trombosis venosa, tromboflebitis o angina de pecho [30].
– Pacientes con cáncer [31].
– Mujeres embarazadas [32].
– Personas con úlceras tibiales [33].
Informe siempre a su médico de que desea someterse a crioterapia y él decidirá si puede recibirla. Las personas con claustrofobia deben pensar detenidamente en este tratamiento. Las criosaunas y las criocámaras no tienen mucho espacio. La única diferencia es que las criosaunas pueden alojar a cinco o más pacientes a la vez, mientras que las criocámaras sólo pueden alojar a una persona.